El Método Pilates: ¿Efectivo como Terapia?

Es frecuente ver recomendaciones de ejercicios como zumba, pilates, yoga o aeróbic en TV, centros de ejercicio o entre amigos. Algunos de estos ejercicios son promocionados como métodos terapéuticos para el tratamiento de ciertas dolencias. Hoy revisaremos uno de ellos: el Método Pilates. Averiguaremos de qué se trata, qué se dice de éste cómo terapia y qué grado de evidencia tiene. Así que ve preparando tu cuerpo con unos estiramientos.

¿Qué es el Método Pilates

Pilates es un método de ejercicio físico que tiene por objetivo fortalecer, estirar y balancear el cuerpo.[1] Fue desarrollado por Joseph Pilates en la década de 1920 bajo el nombre de Contrology[2] (el que podría traducirse como contrología al español), aunque, como podemos evidenciar, ese nombre no prosperó con el tiempo. El nombre de «contrología» se debe a que, según Joseph Pilates, el método permitiría un control voluntario sobre el cuerpo y una adecuada coordinación entre el cuerpo, la mente y el espíritu.[2] Los ejercicios del método se basan en seis principios desarrollados por su autor: concentración, control, centralización, precisión, movimientos fluidos y respiración.[3] Además, estos pueden ser realizados en el suelo sobre una colchoneta o utilizando aparatos diseñados por el mismo Pilates.[1]

Antes de continuar, es importante aclarar lo siguiente. Dado que la palabra «pilates» hace referencia tanto al creador como al método en sí, se realizará la siguiente diferencia: se escribirá con mayúscula «Pilates» cuando se haga referencia Joseph Pilates y, por el contrario, si la palabra está en minúscula, «pilates», se estará haciendo referencia al método.

Joseph Pilates y el desarrollo su método

Joseph Pilates en edad avanzada[2]
Joseph Pilates en edad avanzada[2]

Joseph Pilates (1883-1967) fue un gimnasta y fisicoculturista alemán, quién desde joven se interesó por el desarrollo físico y el ideal griego del cuerpo humano.[4,5] Según distintas biografías, el interés de Pilates pudo haber sido influenciado por sus padres, un gimnasta y una naturópata, además del pésimo estado de salud que tuvo durante su infancia.[6] Durante la década de 1910, se trasladó a Inglaterra para trabajar en un circo, país donde fue detenido al iniciar la Primera Guerra Mundial, al ser considerado un extranjero enemigo.[7] Mientras estuvo en el campo de concentración de la Isla de Man, comenzó a esbozar lo que sería su método de ejercicio físico, tratando y rehabilitando a sus compañeros en prisión.[5,7] Finalizada la guerra, se mudó a Estados Unidos durante la década de 1920, donde formó un gimnasio en el cual se dedicaría a realizar el método pilates, al que acudieron principalmente bailarines lesionados a rehabilitarse.[7]

Según Latey[8], el sistema desarrollado por Pilates se inspira y mezcla varias disciplinas, como la gimnasia, las artes marciales, el yoga y la danza. A ello se le suman pensamientos filosóficos de ciertos autores citados en las obras de Pilates. Entre ellos se destaca a Johann Schiller y su cita «la mente es la que forma el cuerpo» y Arthur Schoepenhauer con la cita «abandonar el propio cuerpo por otra ventaja en la vida es el mayor de los disparates».[8] Con ello y su experiencia, Pilates desarrolló su propia visión sobre la salud, la cual expone en sus dos libros: Your Health (1934) y Return to Life Through Contrology (1945).

Para Pilates, las meta de la humanidad eran la salud y la felicidad, y la única forma de obtenerlas era mediante un perfecto equilibrio entre el cuerpo y la mente.[2,9] Consideraba que el estilo de vida moderno en las ciudades de la época (década de 1930 a 1940) generaba una reducción del estado físico y mental de las personas.[2] Se mostraba crítico contra los mensajes de salud de la época, señalando que eran equivocados, incluso en ocasiones, de forma malintencionada.[9] En general, en su primer libro nunca deja claro qué mensajes son exactamente los inadecuados, aunque podemos encontrar la siguiente cita: «Children are vaccinated with “poison” to keep their health»[9(27p)] (Traducción: «los niños son vacunados con “venenos” para conservar su salud»). Con ello, es posible deducir que se oponía al tratamiento farmacológico de las enfermedades. Eso sí, no deja de mencionar que su método es correcto, que ha sido probado y que «those who hate to see the old order cast aside, refuse to acknowledge the benefits of my system»[9(8p)] (Traducción: «aquellos que odian ver el antiguo orden desechado, se rehúsan a reconocer los beneficios de mi sistema»). Aunque tampoco aporta argumentos corroborables sobre dichos beneficios.

Finalmente, otro detalle interesante sobre su visión de la salud física es que afirmaba que el ser humano debería seguir sus instintos más que pensar, así como lo hacen los animales.[9] En su primer libro, compara a animales con las personas para argumentar su punto sobre la importancia del ejercicio y rechazar las recomendaciones de la época, señalando que los animales tienen una forma física perfecta de fuerza, gracia, agilidad, fortaleza, salud y longevidad.[9] Supongo que en este punto no estaba pensando en los equinodermos sésiles como las esponjas, en los perezosos o en las efímeras.

Los principios del método pilates

Dada la posesividad de Pilates sobre su método, mientras vivió no publicó ningún libro que lo expusiera de forma exhaustiva.[8] Sus dos libros publicados abarcan principalmente su filosofía, ideas principales y unos cuantos ejercicios.[2,9] Por otra parte, tampoco realizo programas de formación en su método.[8] Su legado se debe principalmente a las obras y formaciones que alumnos directos realizaron. En estas obras se resumen los seis principios que componen el método y pilates y que deben ser cumplidos por los ejercicios para ser considerados parte de él.

Ejemplo de un ejercicio de pilates. El modelo es el propio Joseph Pilates.[2]
  • Concentración: Durante los ejercicios se debe prestar atención a la posición y movimiento de cada parte del cuerpo.[3]
  • Control: Es necesario controlar constantemente cada movimiento mientras se ejecutan los ejercicios. Es por este motivo que la concentración es un aspecto relevante en pilates.[3,8]
  • Centralización: Los ejercicios en pilates buscan fortalecer el «centro», que corresponde a la musculatura entre la caja torácica y el piso pélvico.[10] Los movimientos apuntan a fortificar y reafirmar la musculatura del centro mientras se estira, evitando de esta forma un exceso en la fatiga y disminuir lesiones en la espalda baja.[3]
  • Movimientos fluidos: Durante los ejercicios se busca que los movimientos sean suaves y uniformes. Estos no deben ser rígidos, muy rápidos o demasiado lentos. Esto va de la mano con el control.[3]
  • Precisión: Junto con lo anterior, los movimientos deben ser precisos y tal como se indican, sin dejar nada al azar.[3]
  • Respiración: La respiración juega un papel crucial. Cada ejercicio va acompañado con instrucciones sobre cuando inhalar o exhalar.[2,3] La respiración debe ir coordinada con los movimientos.[10]

Además de los principios, otra característica importante es la postura, tal como se observa en una revisión sistemática que buscaba caracterizar los elementos clave del pilates.[10]

Latey[8] expone en su revisión histórica que el pilates ha variado con el tiempo, según quien lo practique, y que, a grades rasgos, se distinguen dos versiones: el pilates clásico y el pilates moderno. La principal diferencia es que el primer grupo sigue al pie de la letra los ejercicios dejados por Pilates[2] o sus seguidores[3], con un número de secuencias y repeticiones específicas, las cuales varían sutilmente dependiendo del usuario. Por otro lado, el pilates moderno sigue la filosofía de Pilates, pero modificando tanto los principios como los ejercicios para realizar una introducción gradual de los movimientos a los usuarios. Además, algunos practicantes añaden factores emocionales o psicológicos.[8]

El método pilates como terapia y su evidencia

Dada la popularidad de la práctica, el pilates se ha prescrito a personas con dolores lumbares.[10] Aunque no solo ello, sino que se ha utilizado en otras patologías. Por ello, uno debe hacerse la siguiente pregunta: ¿es pilates una forma de terapia física válida?, ¿para qué patologías está recomendada?, ¿es segura? A continuación, revisaremos la evidencia científica del pilates en distintas condiciones médicas en las que ha sido estudiada.

Pilates y el dolor lumbar

El dolor lumbar se define como un dolor y malestar localizado entre el arco costal y pliegue glúteos inferiores, con o sin referir dolor de pierna. Cerca del 85% de los casos no puede atribuirse a una patología específica.[11] Yamato et al[12], en su revisión sistemática realizada bajo The Cochrane Collaboration en 2015 que incluyó 10 ensayos controlados aleatorizados (RCT, por su sigla en inglés), buscaban determinar los efectos del método pilates en pacientes con dolor lumbar no específico agudo, subagudo o crónico. Los RCT incluidos debían incluir participantes que cumplieran los siguientes criterios: ser mayores de 16 años, tener dolor lumbar, no tener contraindicación para terapia física, no estar embarazados y no tener una patología espinal compleja. Otro punto que debían cumplir los estudios es explicitar al menos tres de los principios de pilates y que los terapeutas estén entrenados en ello. Se realizó un metaanálisis con 9 de los 10 estudios, lo que incluye un total de 478 participantes, siendo entre 17 y 87 el rango etario de la muestra. Cuando se comparó pilates con intervención mínima, se encontró evidencia de moderada calidad en donde el pilates reduce el dolor, mientras que se encontró evidencia de baja calidad para la mejora en la discapacidad, impresión de mejoría global y funcionalidad en favor del método. Por otro lado, cuando se comparó a pilates con otro tipo de ejercicios físicos, se encontró que no había diferencia significativa entre ellos, con evidencia de baja calidad para dolor y de moderada calidad para discapacidad. Con relación a la funcionalidad, se observó que a mediano plazo hubo una diferencia significativa en favor de ejercicios generales que para pilates. Los autores indican que no es posible sacar conclusiones o recomendaciones dado que no hay evidencia de alta calidad para ninguna comparación.[12]

Se considera que la evidencia es de alta, moderada, baja o muy baja calidad dependiendo del riesgo de sesgo (risk of bias) que posean los estudios.[12] Se considera un sesgo como un error sistemático o una desviación de la verdad de los resultados, como puede ser una sobreestimación o subestimación del efecto de algún tratamiento.[13] Los sesgos puede ser de diversos tipos: a) sesgo de selección, que depende de si hubo o no ocultamiento de la asignación de los grupos a los participantes; b) sesgo de realización, que se relaciona con cómo se enmascaran los participantes o proveedores del tratamiento ante la terapia, posterior a la selección; c) sesgo de detección, sobre las diferencias del cegamiento a los participantes y/o proveedores; d) sesgo de desgaste, referente al abandono y pérdida de participantes y/o sus datos; e) sesgo de notificación, acerca de los resultados que son o no presentados al publicar; f) otros sesgos, como puede ser la contaminación entre grupo control y experimental.[13] Mientras más sesgos se presenten en los estudios, menor será la calidad de la evidencia encontrada, y, por ende, la confianza que se tiene sobre los resultados obtenidos.[12,14]

Ejemplo de un ejercicio de pilates.

Una revisión sistemática de revisiones sistemáticas realizada por el Departamento de Salud del Gobierno de Australia de 2015 analizó diversas terapias naturales, entre los que incluyó el pilates.[15]  Esta incluyó 13 revisiones que incluyeron 18 RCT en total, donde 11 estudiaban el dolor lumbar. Cuando se comparó pilates con intervención mínima, la mitad de los estudios encontraron diferencia significativa con relación a la intensidad del dolor y la discapacidad, mientras que cuando se comparó pilates con otro tipo de ejercicio, no se encontraron diferencias significativas, salvo en uno estudio, donde el pilates salió favorecido.[15]

Eliks et al[16] realizaron una revisión de revisiones sistemáticas realizadas antes de 2018. En estos últimos, se comparó la efectividad de pilates con otros ejercicios utilizados en el dolor lumbar: método McKenzie, programa de ejercicios de fortalecimiento del tronco y ejercicio basados en extensión para el dolor. En general, pilates obtuvo mejores resultados que los dos primeros ejercicios, pero los ejercicios basados en extensión tuvieron un mayor desempeño en la reducción del dolor que pilates.[16] Otro estudio[17], el cual consistió en un metaanálisis en red entre diversos ejercicios físicos con relación al dolor lumbar, revisó 191 RCT, del cual 7,8% correspondían al método pilates, incluyendo a 758 participantes en total. Se observó que pilates puntuó como una intervención efectiva en la reducción del dolor y disminución de las discapacidades, en comparación a otros ejercicios.[17]

Finalmente, una revisión sistemática realizada por la Agència de Qualitat i Avaluació Sanitàries de Catalunya, a petición del Ministerio de Sanidad de España, analizó de la eficacia y seguridad del pilates con relación al dolor cervical, dorsal y lumbar, además de la escoliosis.[18] Tras la selección de los artículos, 20 cumplieron los criterios de inclusión y exclusión señalados. Ninguno de los ensayos informó sobre efectos adversos asociados a la práctica del pilates. La eficacia del pilates se comparó frente a la ausencia de intervención, a dar consejos saludables, al tratamiento farmacológico, a la fisioterapia y frente a otro tipo de ejercicios. Solo en los dos primeros casos el pilates obtiene mejores resultados con relación a la intensidad del dolor y la incapacidad física, mientras que con el resto no hubo diferencia significativa en ambos criterios.[18]

Pilates y obesidad

La revisión del Departamento de Salud del Gobierno de Australia también analizó el efecto del pilates en la mejora de la composición corporal de personas con sobrepeso y obesidad.[15]  Concluyen que los resultados son inciertos. Solo encontró una diferencia significativa en el peso corporal en favor del pilates.[15] Wang et al[19] realizaron un metaanálisis de 11 RCT donde se comparaba el efecto del pilates en la obesidad y el sobrepeso en ausencia de intervención o pautas de estilo de vida, que incluye 393 participantes. Dentro de los hallazgos, se observó que en los participantes obesos hubo una reducción significativa del peso corporal, índice de masa corporal y porcentaje de grasa corporal tras intervenciones de pilates de 10 o más semanas de duración. No se observaron cambios significativos en masa corporal magra ni en la circunferencia de la cintura. Tampoco en intervenciones de duración menor a 10 semanas o en participantes con sobrepeso. La evidencia es considerada de calidad baja a moderada en todos los casos, salvo por el porcentaje de grasa corporal, la cual se considera de muy baja calidad. Esto es producto del riesgo de sesgo moderados que encontraron los autores en los diversos estudios.[19]

Pilates y supervivientes de cáncer mamario

El efecto del pilates en la salud de supervivientes de cáncer mamario fue otro de los aspectos analizados por la revisión del Departamento de Salud de Australia.[15] La comparación fue entre un grupo que realizó pilates y ejercicio físico en casa con otro grupo que solo realizó ejercicio físico en casa. De las variables estudiadas, solo se observó un cambio significativo en la capacidad aeróbica de los participantes, mientras que no hubo diferencia en la flexibilidad, fatiga, depresión o calidad de vida.[15] Por otro lado, un metaanálisis de 2017[20] analizó cuatro RTC que incluyeron a sobrevivientes de cáncer mamario, encontrando una diferencia significativa en la capacidad funcional de las personas en favor del pilates, en comparación a la ausencia de intervención física. Finalmente, Mazzarino et al[21] revisaron 10 RCT sobre el efecto del pilates en la salud de mujeres, que incluyó el cáncer mamario, donde no encontraron un efecto del pilates en la salud de estas pacientes.

Los ejercicios de pilates pueden realizarse en suelo o con el uso de aparatos específicos, como en esta imagen.[a]

Pilates y fortalecimiento muscular

Pinto et al[14] realizaron una revisión sistemática para analizar el efecto del pilates frente a otros ejercicios en el fortalecimiento muscular de pacientes sanos, mediante un metaanálisis de 11 RCT. Hallaron que no hubo diferencia significativa para la fuerza dinámica, fuerza isométrica, resistencia muscular ni el balance frente a los otros ejercicios. Los autores indican que la evidencia es de calidad moderada.[14] Por otro lado, la revisión del Departamento de Salud de Australia[15] analizó la fuerza muscular en adultos mayores, encontrando datos contradictorios donde unos estudios indicaban efectos favorables para el pilates y otros no.

Pilates y otras condiciones de salud

La revisión de Mazzarino et al[21] encontró una mejora en la calidad de vida en mujeres con fibromialgia que realizaron pilates en comparación a ejercicios de relajación. Por otro lado, la revisión de revisiones sistemáticas del Departamento de Salud australiano[15] encontró que no hubo evidencia que permita afirmar que pilates pueda mejorar la calidad de vida de mujeres que sufren incontinencia urinaria.

Tabla 1. Resumen de la evidencia científica del pilates como terapia.

Enfermedad o síntomaConclusión de estudiosTipo de estudiosRef.
Dolor CervicalQuizás favorable
Más efectivo que intervención mínima o ausencia de tratamiento. No superior a otros tipos de terapia.
Revisión Sistemática
Evidencia de calidad moderada a baja.
[15]
Dolor DorsalQuizás favorable
Más efectivo que intervención mínima o ausencia de tratamiento. No superior a otros tipos de terapia.
Revisión Sistemática
Evidencia de calidad moderada a baja.
[15]
Dolor LumbarQuizás favorable
Más efectivo que intervención mínima o ausencia de tratamiento. No superior a otros tipos de terapia.
Revisión Sistemática
Evidencia de calidad moderada a baja.
[12] [15] [16] [17] [18]
ObesidadQuizás favorable
Solo para parámetros de peso corporal, composición corporal e IMC.
Revisión Sistemática
Evidencia de calidad moderada a baja.
[15] [19]
Sobrevivientes de Cáncer MamarioInconclusoRevisión Sistemática[15] [20] [21]
Fortalecimiento Muscular en AdultosPosiblemente favorable
No superior a otro tipos de ejercicios.
Revisión Sistemática
Evidencia de calidad moderada.
[14]
Fortalecimiento Muscular en Adultos MayoresInconclusoRevisión Sistemática[15]
FibromialgiaInconclusoRevisión Sistemática[21]
Incontinencia UrinariaSin efecto comprobadoRevisión Sistemática[15]
Enfermedad o síntomaConclusión de estudios
Dolor CervicalQuizás favorable
Más efectivo que intervención mínima o ausencia de tratamiento. No superior a otros tipos de terapia.
Dolor DorsalQuizás favorable
Más efectivo que intervención mínima o ausencia de tratamiento. No superior a otros tipos de terapia.
Dolor LumbarQuizás favorable
Más efectivo que intervención mínima o ausencia de tratamiento. No superior a otros tipos de terapia.
ObesidadQuizás favorable
Solo para parámetros de peso corporal, composición corporal e IMC.
Sobrevivientes de Cáncer MamarioInconcluso
Fortalecimiento Muscular en AdultosPosiblemente favorable
No superior a otro tipos de ejercicios.
Fortalecimiento Muscular en Adultos MayoresInconcluso
FibromialgiaInconcluso
Incontinencia UrinariaSin efecto comprobado

¿Mucho humo o realmente ayuda?

Como pudimos observar, se han realizado una gran cantidad de estudios y revisiones sistemáticas que analizan el pilates en distintas condiciones de salud, siendo la más frecuente de encontrar el dolor lumbar. A pesar de que en algunos casos puede haber resultados prometedores, la calidad de la evidencia en ningún caso es alta y, por lo tanto, no debiera ser recomendada si hay otras terapias más efectivas. Siempre se debe preferir el tratamiento que tenga mayor evidencia, además de las necesidades particulares de cada paciente.

¿Qué falta para que la investigación en pilates? Por un lado, se requieren estudios con mayor número de participantes. Además, reducir el riesgo de sesgo lo máximo posible, especialmente en relación con el ocultamiento de asignación de grupos a los participantes y el cegamiento de estos, ya que cegar a los proveedores del ejercicio es complejo.[12,19] Pero, por otro lado, la diversidad del pilates es un aspecto que juega en contra. Latey[8] menciona que hay tantas variaciones de pilates como personas que lo practiquen y, que esta diversidad, se puede agrupar en pilates clásico y pilates moderno. En las distintas revisiones sistemáticas, no es posible identificar cuál de estos estilos fueron analizados.[12,14,15,16,17,18,19,20,21]

La falta de estructura puede compensarse con la base del pilates, que son los seis principios. Pero aquí nace otro problema. Wells et al[10] hizo una revisión sistemática con el objetivo de definir qué principios de pilates son tomados en cuenta en las distintas investigaciones que se realizan. Tras analizar 119 papers, que incluían opiniones, estudios de caso, RCT, ensayos controlados no aleatorizados, estudios descriptivos transversales y revisiones sistemáticas, concluyeron que la respiración era considerada en el 49% de los estudios, mientras que los otros 5 principios solo fueron considerados entre el 18% al 21%.[10] Este hallazgo me hace preguntar si los principios son realmente algo útil para el pilates o solo un accesorio prescindible. Andrade et al[22] realizaron un estudio donde analizaron el efecto de los principios del pilates en la actividad electromiográfica de tres músculos: recto abdominal, iliocostal y multífido lumbar. Para ello, estudiaron a 19 participantes que realizaron un mismo ejercicio en cuatro modalidades distintas: superficie estable con principios de pitales, superficie estable sin principios de pitales, superficie inestable con principios de pitales y superficie inestable sin principios de pitales. Solo encontraron una diferencia significativa en favor de los principios de pilates en el músculo iliocostal.[22] Aparte de este estudio, no encontré otro que se propusiera estudiar específicamente el rol de los principios de pilates. En su revisión, Wells et al[10] señalan que los aspectos más relevantes tomados en cuentas en las investigaciones sobre el pilates son el fortalecimiento muscular, la estabilidad del tronco, la flexibilidad y la postura. Por ello, uno de los desafíos que tiene el pilates es redefinir su marco conceptual y analizar si modifica u abandona sus principios.

Finalmente, otro desafío que tiene el pilates es alejarse del propio Pilates. En sus obras, Joseph Pilates se preocupaba más decir que el método funciona que en argumentar el porqué, como da cuenta la siguiente cita: «no other fundamental system, no other standard code, designed to gauge, measure and indicate what really constitutes health normalcy. My method, in that respect, is unique and revolucionary. It stands out all by itself[9(9p)] (Traducción: «ningún otro sistema fundamental ni otro código estándar diseñado para estimar, medir e indicar qué es lo que realmente constituye una normalidad sanitaria. Mi método, respecto a ello, es único y revolucionario. Se sostiene por sí mismo»). En otra de sus declaraciones, pone al lector contra la espada y la pared si no se acepta su método, como vemos a continuación:

«If the art and science of Contrology were universally accepted and practiced, one could confidently predict that mental anguish and physical suffering would progressively decrease from generation to generation, and life would be a real pleasure, instead of the curse it now is to so many of our fellow men[9(p.23)]
(Traducción: «Si el arte y ciencia de la contrología fuera universalmente aceptada y practicada, uno podría predecir con seguridad que la angustia mental y el sufrimiento físico disminuiría progresivamente de generación en generación, y que la vida sería un real placer, en vez de la maldición que es ahora para muchos de nuestros hombres.»)

«If the art and science of Contrology were universally accepted and practiced, one could confidently predict that mental anguish and physical suffering would progressively decrease from generation to generation, and life would be a real pleasure, instead of the curse it now is to so many of our fellow men[9(p.23)]
(Traducción: «Si el arte y ciencia de la contrología fuera universalmente aceptada y practicada, uno podría predecir con seguridad que la angustia mental y el sufrimiento físico disminuiría progresivamente de generación en generación, y que la vida sería un real placer, en vez de la maldición que es ahora para muchos de nuestros hombres.»)

Y sus seguidores no son tan distintos, como podemos ver en el libro de Friedman y Eisen[3], donde realizan afirmaciones sin otorgar la evidencia requerida para respaldarla:

«With the Pilates Method of physical and mental conditioning, you can have all that, and you can have it without doing boringly repetitive exercises or twisting yourself into awkward and unfamiliar postures.
In fact, you can have even more: you can improve your tennis, skiing, skating, running-you name it. You can be better able to resist injury; you can be free of back pain. You can sleep better and get more enjoyment from sex[3(1p)]
(Traducción: «Con el Método Pilates para el condicionamiento físico y mental, tú puedes tenerlo todo y puedes tenerlo sin hacer ejercicios repetitivos y aburridos o contorsionarte a ti mismo en posturas extrañas y poco familiares. De hecho, tú puedes tener mucho más: puedes mejorar tu práctica del tenis, esquí, correr–lo que sea. Puedes estar en mejor forma para resistir una herida, puedes estar libre del dolor de espalda. Puedes dormir mejor y tener mayor placer en el sexo».)

«With the Pilates Method of physical and mental conditioning, you can have all that, and you can have it without doing boringly repetitive exercises or twisting yourself into awkward and unfamiliar postures.
In fact, you can have even more: you can improve your tennis, skiing, skating, running-you name it. You can be better able to resist injury; you can be free of back pain. You can sleep better and get more enjoyment from sex[3(1p)]
(Traducción: «Con el Método Pilates para el condicionamiento físico y mental, tú puedes tenerlo todo y puedes tenerlo sin hacer ejercicios repetitivos y aburridos o contorsionarte a ti mismo en posturas extrañas y poco familiares. De hecho, tú puedes tener mucho más: puedes mejorar tu práctica del tenis, esquí, correr–lo que sea. Puedes estar en mejor forma para resistir una herida, puedes estar libre del dolor de espalda. Puedes dormir mejor y tener mayor placer en el sexo».)

Se entiende que deben atraer al público para que realicen su método, especialmente cuando de ello dependen tanto su economía como su ego. Pero no cuesta nada ser más honestos y no afirmar beneficios sin aportar evidencia o utilizar el miedo para convencer.

Conclusión

En resumen, el método pilates pareciera aportar beneficios en algunas patologías, como el dolor o la obesidad, especialmente cuando se compara con intervención mínima, aunque no pareciera ser mejor frente a otro tipo de ejercicios físicos. También pareciera ser útil para el fortalecimiento muscular. A pesar de ello, no es posible aventurarse para recomendarla como una terapia si hay otros tratamientos con mayor evidencia, ya que la disponible no es de alta calidad y hay varios sesgos que los estudios deben superar. En el resto de las enfermedades analizadas, los resultados son dudosos o ambiguos. Junto a ello, el método pilates requiere redefinirse, para abandonar principios que no aporten e incluir aquellos que realmente son relevantes en la práctica. En mi opinión, pilates debe eliminar a Pilates para progresar.

Referencias Bibliográficas

1. Pilates Method Alliance. The Pilates Method [Internet]. Consultado 6 de junio de 2023. Disponible en: https://pilatesmethodalliance.org/about-pilates/

2. Pilates J, Millar W. Pilates’ Return to Life thought Contrology. Presentation Dynamics Inc.; 1998. Consultado 6 de junio de 2023. Disponible en: https://archive.org/details/pilatesreturntol00jose

3. Friedman P, Eisen G. The Pilates Method of Physical and Mental Conditioning. Doubleday; 1980. Consultado 8 de junio de 2023. Disponible en: https://archive.org/details/pilatesmethodofp00frie

4. About Joseph Pilates [Internet]. Art of Control. Consultado 19 de junio de 2023. Disponible en: https://artofcontrol.com/about-pilates/

5. The Origin of Pilates [Internet]. Balanced Body. Consultado 19 de junio de 2023. Disponible en: https://www.pilates.com/origins-of-pilates

6. Who was Joseph Pilates? [Internet]. Jullian Hessel. Consultado 19 de junio de 2023. Disponible en: https://web.archive.org/web/20060325040520/http://www.jillianhessel.com/pilates_biography.html

7. The History of Pilates [Internet]. Pilates Method Alliance. Consultado 6 de junio de 2023. Disponible en: https://pilatesmethodalliance.org/history-of-pilates/

8. Latey P. The Pilates method: history and philosophy. J Bodyw Mov Ther. 2001; 5(4):275-282. https://doi.org/10.1054/jbmt.2001.0237

9. Pilates J. Your Health: A Corrective System of Exercising That Revolutionizes the Entire Field of Physical Education. Presentation Dynamics; 1998. Consultado 6 de junio de 2023. Disponible en: https://archive.org/details/yourhealthcorrec00pila

10. Wells C, Kolt G, Bialocerkowski A. Defining Pilates exercise: a systematic review. Complementary Therapies in Medicine. 2012;20(4):253-262. https://doi.org/10.1016/j.ctim.2012.02.005

11. Airaksinen O, Brox JI, Cedraschi C, et al. Chapter 4 European guidelines for the management of chronic nonspecific low back pain. Eur Spine J. 2006;15(Supple2):s192-s300. https://doi.org/10.1007/s00586-006-1072-1

12. Yamato TP, Maher CG, Saragiotto BT, et al. Pilates for low back pain. Cochrane Database of Systematic Reviews. 2015;7:CD010265. https://doi.org/10.1002/14651858.CD010265.pub2

13. Alarcón M, Ojeda RC, Ticse IL, Cajachahua K. Análisis crítico de ensayos clínicos aleatorizados: riesgo de sesgo. Rev Estomatol Herediana. 2015;25(4):304-308. Consultado 19 de junio de 2023. Disponible en: http://www.scielo.org.pe/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1019-43552015000400008

14. Pinto JR, Santos CS, Souza Soares WJ, et al. Is pilates better than other exercises at increasing muscle strength? A systematic review. Heliyon. 2022;8(11):e11564. https://doi.org/10.1016/j.heliyon.2022.e11564

15. Baggoley C. Review of the Australian Government Rebate on Natural Therapies for Private Health Insurance. Australian Government Department of Health; 2015. Consultado 12 Junio 2023. Disponible en: https://web.archive.org/web/20160626024750/http://www.health.gov.au/internet/main/publishing.nsf/Content/0E9129B3574FCA53CA257BF0001ACD11/$File/Natural%20Therapies%20Overview%20Report%20Final%20with%20copyright%2011%20March.pdf

16. Eliks M, Zgorzalewicz-Stachowiak M, Zeńczak-Praga K. Application of Pilates-based exercises in the treatment of chronic non-specific low back pain: state of the art. Postgrad Med J. 2019;95(1119):41-45. https://doi.org/10.1136/postgradmedj-2018-135920

17. Fernández-Rodriguez R, Álvarez-Bueno C, Cavero Redondo I, et al. Best exercise options for reducing pain and disability in adults with chronic low back pain: Pilates, strength, core-based, and mind-body. A network meta-analysis. J Orthop Sports Phys Ther. 2022;52(8):505-521. https://www.jospt.org/doi/10.2519/jospt.2022.10671

18. Agència de Qualitat i Avaluació Sanitàries de Catalunya. Eficacia y Seguridad del Método Pilates en las Condiciones Clínicas Seleccionadas. Ministerio de Sanidad de España; 2022. Consultado 19 de junio de 2023.  Disponible en: https://www.conprueba.es/sites/default/files/informes/2022-10/11.2_2019_AQuAS_Pilates_DEF_2022.pdf

19. Wang Y, Chen Z, Wu Z, Ye X, Xu X. Pilates for overweight or obesity: A meta-analysis. Front Physiol. 2021; 12:643455. https://doi.org/10.3389/fphys.2021.643455

20. Espíndula RC, Nadas GB, Rosa MID, Foster C, Araújo FC, Grande AJ. Pilates for breast cancer: A systematic review and meta-analysis. Rev Assoc Med Bras. 2017;63(11):1006-1012. http://dx.doi.org/10.1590/1806-9282.63.11.1006

21. Mazzarino M, Kerr D, Wajswelner H, Morris M. Pilates method for women’s health: systematic review of randomized controlled trials. Arch Phys Med Rehabil. 2015; 96(12):2231-2242. https://doi.org/10.1016/j.apmr.2015.04.005

22. Andrade L, Mochizuki L, Oliveira F, Sousa R, Lima Y. Application of Pilates principles increases paraspinal muscle activation. J Bodyw Mov Ther. 2015;19(1):61-66. https://doi.org/10.1016/j.jbmt.2014.11.011

Referencias de Imágenes

a. Pilates by Red CreaDeporte. Licenciado bajo CC BY 2.0

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos requeridos están marcados *